La Universidad Nacional de las Artes agradece a lxs 58 senadores y senadoras que con su voto convalidaron una norma aprobada por amplia mayoría en ambas cámaras del Congreso de la Nación y posteriormente vetada por decisión presidencial. En la misma sesión también se rechazó el veto a la Ley de Emergencia Pediátrica.
Este 2 de octubre, el Senado trató ambas leyes, sancionadas en agosto y vetadas días después con el argumento de que su implementación generaría inestabilidad en la macroeconomía.

La Ley de Financiamiento Universitario establece las partidas presupuestarias necesarias para que las universidades nacionales puedan continuar funcionando frente a la inflación acumulada, y recompone los salarios de docentes y nodocentes, entre los más afectados del sector de trabajadorxs registradxs. Además, define de dónde provienen los fondos, no crea nuevos impuestos ni compromete el equilibrio fiscal. Por el contrario, busca garantizar presupuestos adecuados para el funcionamiento institucional, asegurar becas y fortalecer la investigación en ciencia y tecnología.
Argentina tiene como emblema a la educación y la salud públicas. Obstaculizar el funcionamiento de estas instituciones perjudica a toda la sociedad, que lo comprendió y expresó en las calles de todo el país el pasado 17 de septiembre.

Las universidades nacionales hacen posible un país con progreso, la formación de jóvenes, el desarrollo de la industria, la innovación y la producción de conocimiento, capital fundamental para cualquier proyecto de nación. Desfinanciarlas implica su destrucción y, con ella, la del futuro soberano de la Argentina.

Esta ley no está en contra de nadie, todo lo contrario. Con más y mejores profesionales, más investigación en ciencia y técnica, más actividad extensionista, inclusión y compromiso, construiremos un país con oportunidades, donde todxs podamos vivir con dignidad, esperanza y sueños para un mundo más justo.