Material complementario
Los rostros de un maestro
Ernesto de la Cárcova fue una figura clave de la escena artística local de entresiglos. Luego de presentar su emblemático cuadro Sin pan y sin trabajo en el Segundo Salón del Ateneo en 1894, se afianzó como uno de los más importantes pintores nacionales. Pero, más que nada, de la Cárcova se dedicó a construir espacios y redes para consolidar el lugar de las artes en la sociedad. Fue profesor en la Universidad de Buenos Aires, en la Academia Nacional de Bellas Artes, y hasta en una Escuela Normal de Kindergarten. Formó comisiones de monumentos, organizó parte de los festejos del Centenario, coordinó programas de embellecimiento de la ciudad de Buenos Aires, supervisó becados e inclusive colaboró con el Hospital Argentino en París durante la Primera Guerra Mundial. Estos fueron sólo algunos de los múltiples rostros de Ernesto, cuya versátil personalidad y activo compromiso le valió el cariño y admiración de sus colegas, quienes lo consideraron un verdadero maestro.
Foto de portada: Foto Baldiserotto, Ernesto de la Cárcova. AGN, Buenos Aires
GALERÍA DE IMÁGENES
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Hall de entrada al estudio de don Ernesto de la Cárcova, agosto de 1921. AGN, Buenos Aires. -
Reunión de los artistas Reinaldo Guidici, Ernesto de la Cárcova, Mateo Alonso, Víctor de Pol, Eduardo Sívori, Martín Malharro y Arturo Dresco. AGN, Buenos Aires. -
Ernesto de la Cárcova con médicos y enfermeras del Hospital Argentino, 18 de noviembre de 1918. AGN, Buenos Aires. -
Ernesto de la Cárcova en su estudio, con el retrato de María de la Cárcova de Ferrari, 1894. AGN, Buenos Aires. -
Leonce Benedit, Auguste Rodin, Henriette Coltat y Ernesto de la Cárcova, 1917. Academia Nacional de Bellas Artes, Buenos Aires. -
Una fiesta en la Legación Argentina en París, julio de 1914. Ernesto De la Cárcova indicado con el número 1. AGN, Buenos Aires.