Con mayoría de dos tercios de los votos, finalmente, el Senado aprobó la Ley de Financiamiento Universitario, que, entre otras cosas, actualiza las partidas presupuestarias para cubrir gastos de funcionamiento, investigación y extensión en las universidades nacionales y permitiría la recomposición salarial docente y nodocente. La Universidad Nacional de las Artes se suma al agradecimiento que expresó a través de sus redes oficiales el Consejo Interuniversitario Nacional -CIN-.
En el día de ayer, pasados casi 5 meses de la histórica marcha en defensa de la educación pública, el Senado aprobó la Ley de Financiamiento Universitario con 57 votos a favor, 10 en contra y una abstención. La ley permitirá la actualización de partidas, además de permitir la actualización de los salarios de trabajadores y trabajadoras docentes y nodocentes, que en la actualidad, no alcanzan a cubrir las necesidades básicas. Además, la ley prevé una actualización mensual por inflación y establece una retroactividad al 1º de diciembre de 2023.
La diferencia obtenida por la mayoría es lo suficientemente amplia como para intentar poner freno a un posible veto presidencial, ya que el jefe de Estado anunció que vetará la norma.
El CIN, la Universidad Nacional de las Artes y varias universidades nacionales celebraron esta conquista y agradecieron a los senadores y senadoras nacionales que votaron la ley, ya que previamente, desde toda la comunidad universitaria, se instó a que así lo hicieran.
Por su parte, la rectora de la UNA, Sandra Torlucci, estuvo presente en el Senado durante la sesión que tuvo como resultado la aprobación de la Ley de Financiamiento Universitario. Además de la rectora Torlucci, presenciaron la sesión Oscar Alpa, rector de la Universidad Nacional de la Pampa, y vicepresidente del CIN; Arnaldo Medina, rector de la Universidad Nacional Arturo Jauretche; y Ricardo Serra, vicerrector de la Universidad Nacional de Avellaneda, quienes pronunciaron su satisfacción y agradecimiento a las senadoras y senadores que se comprometieron y acompañaron con su voto para transformar en Ley este proyecto indispensable para garantizar el funcionamiento de las universidades públicas que trabajan día a día para la construcción de un futuro mejor para Argentina.
Los fondos destinados a las universidades, según la ley sancionada, se distribuirán en función del número de estudiantes de cada universidad, las carreras ofrecidas, cantidad de egresadxs, hospitales y escuelas secundarias que tengan a cargo, así como también, la actividad científica, tecnológica y de extensión que desarrollen.
Asimismo, también da cuenta de la realización de auditorías sobre la ejecución de los fondos universitarios, que estarán en manos de la Auditoría General de la Nación.
La diferencia obtenida por la mayoría es lo suficientemente amplia como para intentar poner freno a un posible veto presidencial, ya que el jefe de Estado anunció que vetará la norma.
El CIN, la Universidad Nacional de las Artes y varias universidades nacionales celebraron esta conquista y agradecieron a los senadores y senadoras nacionales que votaron la ley, ya que previamente, desde toda la comunidad universitaria, se instó a que así lo hicieran.
Por su parte, la rectora de la UNA, Sandra Torlucci, estuvo presente en el Senado durante la sesión que tuvo como resultado la aprobación de la Ley de Financiamiento Universitario. Además de la rectora Torlucci, presenciaron la sesión Oscar Alpa, rector de la Universidad Nacional de la Pampa, y vicepresidente del CIN; Arnaldo Medina, rector de la Universidad Nacional Arturo Jauretche; y Ricardo Serra, vicerrector de la Universidad Nacional de Avellaneda, quienes pronunciaron su satisfacción y agradecimiento a las senadoras y senadores que se comprometieron y acompañaron con su voto para transformar en Ley este proyecto indispensable para garantizar el funcionamiento de las universidades públicas que trabajan día a día para la construcción de un futuro mejor para Argentina.
Los fondos destinados a las universidades, según la ley sancionada, se distribuirán en función del número de estudiantes de cada universidad, las carreras ofrecidas, cantidad de egresadxs, hospitales y escuelas secundarias que tengan a cargo, así como también, la actividad científica, tecnológica y de extensión que desarrollen.
Asimismo, también da cuenta de la realización de auditorías sobre la ejecución de los fondos universitarios, que estarán en manos de la Auditoría General de la Nación.
